Y la aventura finaliza en Es Grau.

Duermo en Es Canutells. No es la más bonita de las calas para dormir. Pero es una buena cala para cenar y para hablar plácidamente con la gente del lugar.

El día comienza a las siete de la mañana. Hoy viene Carles para acompañarme en la última etapa. Si todo va bien llegaremos a Es Grau, treinta y pico kilómetros. Consulto las previsiones meteorológicas y parece que el viento, para variar, no dejará de acompañarnos. Tendremos viento de norte F4-F5 a partir de mediodia. Viento de cara! Habrá que sufrir para llegar a Es Grau.

Desayuno... y estoy bien acompañado por una familia al completo a la que le encantan las nueces...



Carles y Teresa llegan a la cala. Carles trae consigo su pala esquimal. El paleará con mi pala Werner Ikelos, una maravilla. Yo palearé con la maravillosa pala de Carles.
Iniciamos la marcha y rápidamente llegamos a las calas Binidalí y Biniparratx. En este paraíso tenía intención de dormir la noche anterior... si no hubiera anochecido como siempre! :)



Carles ha venido con una piragua recién estrenada. Está encantado con ella. La etapa inicial de la vuelta sirvió para estrenarla. Me llama la atención el color de la piragua. Es un color muy apropiado en lo que a seguridad se refiere. Este color es visible desde largas distancias.



Avanzamos hacia Punta Prima a buen ritmo y de camino nos encontramos otra de las cuevas en la que la cúpula ha cedido. Esta es inmensa. Aquí Carles se acerca a ella.



Poco después nos adentramos en cala Biniancolla, una de las preferidas de Carles. Esta cala mantiene el pueblo de pescadores típico de Menorca. En la cala no suele haber turismo pero sí muchas criaturas jugando y chapoteando en el agua. También aqui podeis encontrar las mejores pizzas de la isla! :) Una terraza preciosa al fondo de la cala sirve para disfrutar el paisaje y degustar estos placeres :)



Hemos pasado Punta Prima. Protegidos del viento y hablando de infinidad de cosas. Disfrutando del paleo esquimal y haciendo trabajar algunos músculos que no saben ni recuerdan los ciento sesenta y tantos kilómetros que ya he recorrido para llegar aquí...



Llegamos a Alcaufar. Una torre de vigilancia y la cavidad impresionante que hay bajo ella nos reciben...



...y avanzamos hacia el Port de Maó. El sol hace brillar la piragua de Carles.



Y la entrada en el puerto nos muestra La Mola. Todo un complejo histórico militar, visita turística obligada a la isla. La historia de este lugar es bien curiosa. Carles aprovecha para explicarme detalles de la misma.



Entramos en el puerto y paramos a comer algo en cala Teulera. Nos espera una tarde intensa con algo de viento norte. Las previsiones se confirman. Una fuerza 4/5 se empeñará en luchar contra nosotros... pero Es Grau, a lo lejos, comienza a intuirse en el horizonte.



Avanzamos con decisión. Carles adapta su ritmo al mío, algo más cansino y castigado por todo el trayecto que llevan grabado mis brazos y espalda. Aparece el sol que poco a poco cae en la tarde. Nos recibe así en Es Grau...



El recorrido está completado. Antonio nos recibe en Es Grau y asume las labores de fotógrafo. Carles y yo aprovechamos para jugar un poquito. Algunos apoyos, algunos esquimos y algún que otro jueguecito de equilibrio con la pala.





El sol ilumina nuestras piraguas. Los colores de ambas merecen una foto.



Y por último, desembarcamos en el mismo lugar de donde partimos, seis dias antes. Hemos vivido algo más de 180 kilómetros intensos.



El viento ha sido un compañero constante. Pero ha sido placentera su compañia, como también lo ha sido la de Carles, la de Teresa, la de Nolo, Josep y Jose Luis, la de Pablo y Quim, la de Miguel y Marta, la de Maria Antonia y Maria Eugenia, la de Manolo y Juan Carlos, la de Miriam, Raquel y Marina! :) La de Antonio.

El gorro que me ha acompañado en la vuelta lo entrego a Antonio. Para mí ha sido un placer profundizar en su alma, marina y aventurera. El gorro queda en buena cabeza. Seguro que vivirá grandes aventuras con este tipo, sediento aún de grandes aventuras.

He finalizado la vuelta en seis dias. Un día antes de lo previsto. Mañana aprovecharemos esto para navegar en vela y disfrutar de una buena cena. Mañana me despediré de todos ellos... hasta la próxima.

Un saludo a todos. :)